Durme, durme hermosa donzella

Feliz de estrenar Septiembre. Doy carpetazo al funesto agosto. Se acabó pasear malhumorada por la casa apretando dientes y deseando que acabara el mes. El tiempo es más amable, y las cercanas vacaciones me encontrarán con los brazos abiertos.

Me doy cuenta de que en casa ha faltado la música y de que lo único que sonaba en mi cabeza eran los tambores del trabajo. Revuelvo los CDs que descansan en una enorme caja de cartón que se ha convertido en su residencia definitiva. Tengo que vaciarla entera hasta encontrar lo que busco: una nana sefardí. Durme durme.

En el sofá me espera Lola y un montón de retales para doblar y guardar. Son los restos de los bloques de la colcha que he estado cosiendo en Agosto. Una vez acabada la parte central, descansará algún tiempo en la estantería hasta pasar a la siguiente fase. Es un proyecto a largo plazo, minucioso, colorista, alegre, a veces muy frustrante, pero en conjunto satisfactorio. Vamos... como la Vida misma...