Viento sur y temperaturas veraniegas. La borrasca Bárbara amenaza con vientos que hacen honor a su nombre. Ojalá soplara y soplara y llevándose consigo las malas noticias como si de hojas secas se tratara.
Aprovecho los cielos despejados para fotografiar Dolly Days entre sonidos de cencerros. Vacas y caballos triscan hierba pacificamente y sólo levantan la cabeza cuando Maggie se acerca curiosa a algún potrillo juguetón.
Los vestidos del quilt son copias de los que la diseñadora Linda Hohag y sus hermanas usaron en su infancia. En los años 50 se dió el pistoletazo de salida al mundo moderno, industrializado y consumista que nos ha traído hasta hoy. Tanto correr para acabar aturdidos, preocupados, perimetrados, confinados...
Aunque parezca lo contrario, no tengo añoranza de tiempos que no conocí. Abrazo lo bueno del progreso y de la tecnología pero intento mantener sanos lazos con otros ritmos de vida más lentos y propicios para el ser, crecer y disfrutar.
Que estas fotos sirvan de relax visual, de paseo por los ratos de costura y por las ganas de vivir en cualquier circunstancia. Y si éso no fuera suficiente, acompáñese de música que siempre ayuda. Sugerencias? Algo viejo y de los 50. Subo el🔊 y hago click en publicar.