Con las Manos en la Masa

Cualquier excusa sirve para reunirse en torno a algo rico y compartir un rato de conversación, recuerdos y buenos momentos. Había sido el cumpleaños de una amiga y como soy un desastre en cuestión de fechas, se me pasó. Días después hice pan casero para una merienda (nada ligera, jejejee) y rematamos con un esponjoso bizcocho.

Ella es muy de azules, y como además le encanta cocinar, le hice un delantal. El azul no es un color muy presente en mis estanterías, pero rebuscando, di con una tela de tazas que nos trajo la hija de Sara de JoAnn hace algunos años ya. Estos delantales se hacen rapidísimo, casi en una tarde, da igual que se añada un bolsillo, un dibujo aplicado o lo que surja. 

 

 

Me despido con imágenes de otra cocina. Se puede visitar en el último piso del Museo de Artes Decorativas de Madrid. Siempre un placer recorrer las salas y reencontrar mis piezas favoritas.