lunes, 28 de abril de 2014

Cheek to Cheek

Cuando era pequeña, pasaba horas dibujando. Supongo que, como corresponde, trabajaba con media lengua fuera y el gesto concentrado. Guardaba todo en una gran carpeta con tapas de plástico marrón. La carpeta tenía una molesta inscripción del “Ministerio de Trabajo”. Me la trajo mi padre, aunque ninguno de los dos recordamos de dónde pudo haber salido. Cuentos, libros para colorear y cuadernos cuadriculados en los que garabatear. Jamás me aburría y ahora es incluso mejor, porque ahora dibujo y trabajo el color con telas e hilos.

Sigo con los bloques del nuevo quilt. Recién empezado el segundo, me he dado cuenta de que al primero le falta una… presentación oficial? 








Me tomo una bien merecida pausa: té con pastitas. La flor del primer bloque, es una peonía. En alguna olvidada carpeta, debo tener fotos que hice en el botánico de Pagoeta {AQUÍ}. Los pétalos tienen la misma textura y movimiento que un vestido de Ginger Rogers. Me dejo acunar por la tranquila melodía del Cheek to Cheek {AQUÍ} y muy lentamente… me duermo… z...zz…zzz



  

2 comentarios:

  1. Que placer leerte! Que estás creando? Bonitos y elegantes lo colores que has elegido. Feliz semana.

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  2. Livyyyy! Espero que sea otra colcha amorosa. La estación rebosa luz. Feliz semana!

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