sábado, 2 de septiembre de 2023

Gestos Humanos

 

Había ido a regar las plantas a casa de unos amigos que están de vacaciones y ya en el parque, vi a un señor mayor caminando hacia mí con aspecto desorientado. Pensé en la residencia del parque creyendo que había salido y no sabía volver. Me paró para preguntarme por una clínica. Una clínica? Por su tono pensé que estaba perdido en el sentido más amplio de la palabra. Indagué un poco evitando preguntas demasiado personales hasta que él añadió dubitativamente: "una clínica donde hay doctores..."

Tardé unos segundos y recordé que en la antigua fábrica de pan (que iba para museo) habían abierto un ambulatorio de la Seguridad Social. No sé quien se alegró más, si él por haber encontrado lo que buscaba (no es fácil saber lo que buscamos y mucho menos encontrarlo) o yo por haberle sido de ayuda. Tenía ojos de un azul apagado pero cuando le señalé el edificio se le iluminaron. Seguimos nuestro camino, él aliviado y yo un poco más contenta a pesar del calor. Interacciones gratificantes.

Me despido con unas imágenes de algo pequeñito que estoy terminando. Participo en el intercambio de doll quilts que organiza Leanne de @stichingpixie hechos con telas Tilda. Los grafitti, por si alquien es tan aficionado como yo, se encuentran en Trespaderne, un pequeño pueblo de Burgos.








 




5 comentarios:

  1. Hola Esther, ya estamos de vuelta y ojala sea muy intensa. Tu entrada es de lo más tierna por varios motivos. El relato que nos has contado sobre el abuelillo buscando a los doctores, me ha llevado a los abuelos que veo cada vez que visito a mi madre. Tu mini quilt con telas de Tildas, es una preciosidad. Seguro que a quién le llegue le encantará y tus fotos de los grafitis son para quedarte observándolos todos los detalles. Bonita entrada. Un beso

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  2. El día menos pensado los desorientados podríamos ser nosotros. Es un gesto que no cuesta nada y que por el contrario multiplica nuestro día de buenas sensaciones.

    En cuanto a tu proyecto y las imágenes que nos dejas realmente chulos.

    Un abrazo.

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  3. ¡Que detallista eres, Esther! una monada tu labor con telas y muy bonitas las pinturas callejeras.
    Un beso.

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  4. Con que poco podemos ayudar a la gente. Aquí solo ha bastado una explicación, pero que gran satisfacción ha sido el poder ayudarlo. Todavía hay esperanza para los humanos.
    El miniquilt como siempre con mucho mimo, y cariño, y el resultado precioso.
    Un besin

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  5. Saludos Esther! Ese anciano buscaba a alguien gentil y se topó contigo.
    Será un pequeño trabajo,pero tiene su complejidad, además de belleza.
    Un abrazo

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